El Ilicitano le toca viajar para hacer frente al Vilamarxant, uno de los equipos recien ascendidos y que está dando la sorpresa, como los otros dos clubes nuevos en la categoría.
Los franjiverdes tendrán que ir hasta el interior de Valencia para disputar este encuentro. No, no nos referimos al interior de la ciudad, sino al interior de la propia provincia de Valencia.
El equipo dirigido por Fidel Martínez ha estado entrenando esta semana sabiendo la importancia de conseguir todos los puntos posibles. La parte fácil del calendario ya ha terminado. Ahora comienza una fase dura, difícil y fría.
Los jugadores deben ser conscientes de que ya no hay más pruebas ni tiempo de adaptación ni nada. Ahora es cuando toca salir con todo y demostrar lo que cada uno vale.
Algunos jugadores con molestias han estado entrenando ya con normalidad estos días. Fran Martínez y Emile Waita han estado a tope para poder llegar en las mejores condiciones para este encuentro. Será difícil que le puedan quitar el puesto al central Guille, quien ha llegado con fuerza y está dando un buen rendimiento.
También se ha recuperado Óscar Gil, que en el último partido cayó enfermo a última hora y no pudo jugar. El lateral derecho ya ha debutado con el primer equipo, y está deseando dar un mejor rendimiento para poder repetir.
En caso de recuperar a los centrales, Jero podría volver a la posición de mediocentro. Más todavía cuando el Ilicitano tiene la baja de Pablo Aguilera por la tarjeta roja que vio en el encuentro ante el Atzeneta.
Pero no sería la única variante, puesto que el Ilicitano siempre podría salir con sus dos extremos: Khalok y Juanjo. Como siempre, este tipo de decisiones dependen más del rival y no se sabrán hasta el último momento.
Además, otro jugador que podría reaparecer es el mediapunta Adrián Molina. Su último encuentro fue en la jornada 10, ante el Jove Español, hace ya más de un mes. El jugador ha estado recuperándose durante todo este tiempo.
La capacidad ofensiva de Molina podría ser lo que necesite el equipo para lograr romper a las defensas rivales.
A todo lo anterior hay que sumarle una nueva semana más de entrenamiento a Iván Cassano y Fran Roldán. Ambos jugadores mejoran su resistencia física para poder aguantar más minutos en el terreno de juego.
Con todas estas variantes, el Ilicitano vuelve a ser un equipo difícil de predecir. Esperemos que las piezas encajen y los franjiverdes consigan poner distancia con los puestos de abajo.
