Juan Marín.
La temporada 2019/2020 del Ilicitano va a ser una de las más atípicas, tanto por su forma de concluir debido al coronavirus, como también por cómo empezó el equipo y la racha negativa de cara a puerta en la segunda vuelta.
Con un caras nuevas en el cuerpo técnico (llegaron Félix Prieto, Juan Canales y Joseto), comenzó otro año con algunas novedades, pero también con caras ya conocidas.
Primer entrenamiento del Ilicitano 2019/2020 con el nuevo cuerpo técnico (julio 2019)
Castillo, Molina, Jero Rocamora y Kiko Pomares siguieron en el equipo. Jugadores que llevan ya varias temporadas en el filial franjiverde. Aunque no para todos fue igual. Kiko no pudo realizar la pretemporada por problemas en su rodilla. Más adelante, tras las pruebas realizadas, tuvo que pasar por quirófano.
No serían los únicos en repetir en el Ilicitano. De la temporada anterior, Iván ‘Cassano’, Manu Palma y Perujo continuaron en el equipo. También lo hicieron los jugadores de la cantera Nacho Ramón, César Moreno, Javi López y Brian Bonaba.
Además, jugadores del Juvenil ‘A’ se unieron al equipo, al superar la edad para seguir jugando en el División de Honor. José Salinas, Alexis Rastoll, Diego Martínez y Nacho Pastor, comenzaron su camino en el fútbol senior.
Con todos estos jugadores, no se realizaron muchos fichajes durante el verano. Mourad, Teddy, Henrique y Alejandro Huerta se unieron al club franjiverde. El defensa estuvo toda la temporada en el División de Honor, que realizó una buena actuación.
También se unió Alejandro Satoca, portero que estaba cedido y que volvió al club tras dicho periodo. Mismo caso con Alberto Rubio, donde no se sabía si el extremo iba a reforzar al primer equipo o al filial franjiverde.
Otro nuevo regreso fue el del central Rubén García, que ya estuvo durante la etapa de Vicente Parras. Un refuerzo de lujo para el Ilicitano, con la experiencia del jugador.
Otra duda fue si Óscar Gil estaría con el Ilicitano o con el primer equipo. El lateral derecho derribó la puerta, como dijo Pacheta, y al final dio el salto a la Segunda División.
Primeros partidos con buenas victorias
La pretemporada fue dura para el Ilicitano en el tema físico, con resultados dispares. Victorias ante la UDI y el Almoradí, pero derrotas ante el UCAM Murcia ‘B’, Atlético Albacete y el Eldense.
Sergio Pelegrín estuvo con su laboratorio de pruebas para dar con la tecla. En estos partidos, pudimos ver una clara 4-1-4-1. Pero finalmente, Pelegrín dio la sorpresa en su primer partido contra el Atzeneta de David Albelda.
Primer once inicial del Ilicitano 2019/2020 (Foto: Marina Ribera)
Una formación que pudimos ver en los entrenamientos previos al partido, y que no quisimos desvelar en su momento. El cambio fue la incorporación de Nacho Ramón al mando de Pelegrín, hasta entonces, realizando entrenamientos con el primer equipo.
Con Nacho Ramón y Mourad, la duda estaba en quién jugaría en punta de ataque. Sergio encontró la fórmula para que jugaran los dos juntos, pese a ser de perfiles similares. Esto le dio al Ilicitano una fuerza ofensiva más alta de la esperada.
El primer partido terminó en 1-1, pero fue un buen comienzo ante uno de los equipos revelación de la temporada. El Atzeneta no empezó con buen pie, pero al final fue cogiendo ritmo y luchará por el ascenso a Segunda División ‘B’.
Pero tras esta primera toma, llegaron las victorias. Cuatro partidos seguidos ganando, ante CD Roda, Vilamarxant, Paterna y Novelda. El Ilicitano se afianzó en la tercera plaza, con 13 puntos, en zona de ascenso.
Todo parecía indicar que el equipo iba a luchar por una plaza de ‘play-off’. Pero Sergio Pelegrín siempre mantuvo los pies en el suelo. En cada rueda de prensa, bajaba la euforia, sabiendo que esto no es cómo empieza, sino cómo acaba.
No le faltó razón, pues en los próximos meses, Pelegrín perdió a piezas importantes en su equipo, lo que dejó al Ilicitano bastante mermado.
Kiko fue el primero en pasar por quirófano, pero más adelante, en el ‘derbi’ ante el Hércules ‘B’, Jero Rocamora sufrió una importante lesión en su rodilla.
A Pelegrín le tocó modificar sus planes, dando más minutos al ‘rookie’ Nacho Pastor, quien mostró un nivel alto para ser su primera temporada en el fútbol senior.
Nacho Pastor (Foto: Marina Ribera)
En noviembre del 2019, Pelegrín perdió a otros dos jugadores importantes de su once. Perujo y Rubén García cayeron lesionados, teniendo que salir al rescate los juveniles José Ruiz y Barri. Al mes siguiente, fue ‘Cassano’ quien no pudo seguir jugando por molestias en su rodilla. Tanto César Moreno como Jony Álamo, cogieron el testigo para cubrir su baja.
Al final de la primera vuelta, el equipo estaba en 9ª posición, con 26 puntos. Ya se hacía muy difícil intentar coger uno de los cuatro puestos, aunque por el momento, no parecía que fuera a peligrar la permanencia del equipo.
La realidad fue otra en la segunda vuelta, donde tocó restructurar al equipo por completo, teniendo a varios juveniles para luchar por no descender; y reforzándose en el mercado de invierno.
