Fotografía: Jesús Hernández / Fútbol Base ECF
Es difícil realizar una crónica sobre un partido que sólo ha durado 45 minutos. Pero vamos a intentar comentar todo lo ocurrido en este primer tiempo, donde una torrencial lluvia suspendió el encuentro al dejar el campo impracticable para poder seguir jugando.
La alineación inicial del Ilicitano sorprendió con algunos cambios con respecto al anterior partido. El defensa ‘Limón’ se quedó fuera por la entrada de Cocca en su posición, mientras que Pablo García ocupó el carril izquierdo.
Pamies, Javi Gómez y Carles Marco repitieron en la defensa. Pero hubo novedad bajo palos, donde el portero Jesús López entró por ‘Juanpe’ en este encuentro.
Alfaro y Quintana repitieron en el centro del campo, con la novedad de Avelino Sánchez en la zona de ataque. Pero el jugador no jugó de delantero centro, sino que lo hizo partiendo de interior en la izquierda, dejando la posición en punta para Bane Knezevic. Acompañando arriba, el extremo Ángel Higuera por la zona derecha.
Los primeros minutos, fue dominio del Ilicitano, donde empezaron a avisar antes de que llegara el primer gol. Higuera tuvo una oportunidad que no pudo aprovechar porque el linier levantó el banderín por un supuesto fuera de juego.
La insistencia del Ilicitano dio sus frutos en una jugada por la banda izquierda. Pablo García condujo para filtrar un pase al hueco al desmarque de Avelino. El delantero franjiverde encaró a su marca y le superó en velocidad para poner luego un balón al corazón del área.
Allí apareció Alfaro para pegarle como pudo, pero con la suficiente fuerza para dar en un defensa del Orihuela y colarse dentro de la portería rival.
El 1-0 puso al Ilicitano con ventaja, pero el Orihuela cambió por completo y dio un paso adelante para hacerse con el control de balón y poner contra las cuerdas al Ilicitano.
Jesús López tuvo que intervenir con una parada a mano cambiada para evitar el gol del Orihuela, y mantener con vida al filial franjiverde. De hecho, Carles Marco tuvo una gran ocasión de anotar con un contrataque del Ilicitano, donde su disparo golpeó el palo.
De pasar al 2-0 se terminó con el 1-1 en tan sólo un minuto. Tras esta ocasión de Carles Marco, el Orihuela sacó un córner donde el balón terminó dentro de la portería local. El gol fue en propia puerta tras intentar despejar el esférico.
Diluvio en pocos minutos
Tras el gol del empate del Orihuela, las nubes negras cubrieron por completo el cielo y una gran cantidad de agua cayó en cuestión de pocos minutos. Los aficionados buscaron refugio a la carrera, mientras que los paraguas eran totalmente inútiles por el viento y la fuerte lluvia.
El partido se siguió disputando, donde los jugadores tuvieron que hacer frente a unas condiciones muy adversas. Enseguida, el campo del Diego Quiles comenzó a encharcarse, y el esférico no rodaba bien.
Los controles eran más difíciles debido a la lluvia, y los resbalones cada vez más frecuentes. El colegiado decidió dejar seguir, ya que quedaba poco tiempo para el descanso.
Los equipos se fueron a vestuarios para intentar entrar en calor y buscar ropa seca. Pero la lluvia torrencial no cesaba, y el Diego Quiles cada vez acumulaba más y más agua en algunas zonas del campo.
El trío arbitral saltó al terreno de juego junto a los delegados para mirar el estado del terreno de juego. Viendo que en algunas zonas el balón se quedaba totalmente parado, y el riesgo importante de sufrir alguna lesión por la tierra blanda, el árbitro decidió suspender el encuentro.
La segunda parte de este partido se disputará en una fecha que deberá asignar la Federación Valenciana de fútbol.
