Uno de los nuevos jugadores que llegó al filial franjiverde es el mediocentro Quintana, quien ha asumido el rol de llevar el peso del juego en el equipo y de ser la computadora para realizar los cálculos y los pases necesarios para superar a la defensa rival.
Alberto Pérez Quintana (1996) es un mediocentro polivalente cuyas habilidades le permiten situarse en distintas zonas. En la pretemporada del Ilicitano, ocupó las posiciones de extremo, mediapunta, delantero y mediocentro. Un sinfín de posibilidades para un jugador con mucha técnica y excelente golpeo con el balón.
Pero toca decir que donde más ha sufrido Quintana ha sido cuando le tocó jugar en la posición más avanzada. Como delantero hay habilidades suyas que se desperdician como la visión de juego y la calidad de sus centros. Por eso mismo ha destacado más cuando ha jugado en la posición de mediocentro o mediapunta.
También de extremo se pueden aprovechar sus formidables centros lanzados con precisión y con efecto para que llegue al rematador de la forma más efectiva. Aunque aquí toca matizar. Si ocupa dicha posición es para que juegue como un extremo hacia dentro, y dejar la banda libre para otro jugador con mayor velocidad y aceleración.
Es por este motivo que también destaca en la posición de mediocentro organizador. Con Alfaro como su escudero para recuperar balones y defender, las funciones de Quintana se pueden centrar en mover el balón, buscar el pase y darle dinamismo al juego del equipo.
Su visión de juego es de los más destacados en el equipo, y fruto de ello le ha valido para ser uno de los jugadores con más minutos disputados. Además, ha sido titular en los 7 partidos que ha disputado el Ilicitano.
Por el momento, está siendo de los jugadores fijos para Alberto Gallego. El equipo cada vez va de menos a más, pero no podemos obviar las dificultades del equipo para romper la línea defensiva contraria o para anotar las pocas ocasiones que consiguen generar.
Pero Quintana es un jugador necesario para buscar esos huecos y superar al rival en determinadas situaciones. No es lo único que hace falta, pues sin jugadores que busquen la ruptura o los espacios hace totalmente inservible los pases que pueda generar un mediocentro con visión de juego.
